Los principios de LAN moderna aplican en muchas verticales del mercado: Manufactura, salud, comercio, educación, transporte, y tratan sobre unos mínimos que se deben considerar en el diseño de redes LAN acerca de puntos que son relevantes hoy día, como la responsabilidad ambiental, la necesidad de tener inter-operabilidad de distintos sistemas y el crecimiento acelerado de soluciones como IoT.
Interoperabilidad y retos:
En el mercado de seguridad electrónica nos enfrentamos a un gran reto y es que todo tiende a migrar a IP, hace varios años cada sistema e incluso cada marca tenía sus protocolos propietarios para la transmisión de señales, y los esquemas de integración entre ellas eran bastante herméticos y poco flexibles. Hoy día vemos que las cámaras IP por sus mayores y mejores prestaciones tienen una mayor acogida, que muchos clientes buscan poder monitorear sus sistemas en tiempo real y no trabajar con una sola marca, sino tener la facilidad de integrar y trabajar aprovechando las ventajas que cada fabricante pueda ofrecerle.
Esto conlleva a que a la red de datos cada vez se integren más aplicaciones y dispositivos con mayores prestaciones y por tanto se hace importante que su diseño esté en capacidad de soportar todas las exigencias de los sistemas conectados. Es necesario cambiar el concepto tradicional de implementación de estas redes y comenzar a aplicar unos principios básicos que permitan tener una red robusta, segura y correctamente dimensionada para los elementos con los que esté trabajando.
¿Cuáles son los principios?
- Vista de afuera hacia adentro: Considerar la red desde su núcleo hacia las capas más externas es un error común, es importante identificar las necesidades individuales de ancho de banda, energía y tipo de aplicación de cada dispositivo en la red para no tener una red homogénea, sino dimensionada eficazmente para cada elemento.
- Reducir, reutilizar y reenfocar: Hay componente de responsabilidad ambiental que todos debemos considerar en un diseño, si además de esto se tiene en cuenta el factor económico resulta que hay muchos materiales de una red existente que se pueden aprovechar para la modernización del sistema sin que represente el cambio en su totalidad, lo que permite destinar el presupuesto en más y mejores equipos.
- Segregar las aplicaciones: Si bien la tendencia es tener una interoperabilidad entre los sistemas de una red, es conveniente en muchos casos separar físicamente cada una de las redes individuales y tenerlas integradas en un nivel más alto, esto facilita la administración de las redes y reduce significativamente los conflictos de necesidades puntuales que tenga cada sistema si están en una misma red.
- Implementar soluciones amigables con el medio ambiente: Esto va en el mismo enfoque del segundo punto, utilizar dispositivos que transmitan a mayores distancias reducen la cantidad de gabinetes de cableado y considerar las necesidades energéticas de la red para entregar sólo lo que se requiera en el punto final, esto en favor de facilitar por ejemplo una certificación LEED para un edificio.
- Pensar en la seguridad y administración: Por supuesto que las redes deben contar con todos los elementos de seguridad para blindarla ante ataques externos, pero también se debe pensar en una red que sea fácil de configurar, implementar, administrar y solucionar errores.
- Maximizar la eficiencia y hacer redes flexibles: Considere el impacto de todos los puntos finales y aplicaciones adicionales en la red para garantizar la fiabilidad general, la seguridad y la facilidad de gestión hoy y en el futuro, que permitan continuar adicionando dispositivos en la red y esta pueda crecer y escalar conforme se vaya demandando.